miércoles, 2 de enero de 2008

Raticos inolvidables... de risa...

Raticos inolvidables…de risa…

Empezamos el nuevo año y quiero regalaros uno de los mejores tesoros que tenemos las personas… la risa, la sonrisa, la carcajada y el buen humor… que, como demuestran las investigaciones científico medicas, mejoran la salud, ayudando en la inmunidad contra enfermedades… También sirven para encontrarse bien, relacionarse mejor con las personas, enfrentarse a los problemas… Ser más felices.



Tanto en las excursiones de montaña como en otras muchas actividades… el buen humor, la simpatía, las bromas, los chistes, las anécdotas… nos salpican de sonrisas, carcajadas y “raticos verdaderamente divertidos e inolvidables”… Tanto cuando los vives como cuando los recuerdas o los comentas y compartes con otras personas… ¡Quien no recuerda los chistes que le contaron en una acampada, en los viajes, en los descansos para reponer fuerzas!…

Es encantadora la sonrisa de los bebes, cuando les miras a los ojos y te sonríen, te dan ganas de reír, te contagian su simpática risa… De niños nos reímos mucho más que de adultos… los ancianos se pueden pasar semanas sin ni siquiera sonreír… ¡¡Que lástima que al crecer vayamos perdiendo este regalo de la alegría!!...

Otro día os pondré alguna foto de cuando era bebe, pero hoy os pongo una muy simpática de cuando tenía dos añitos con un gorro de Hada y los zapatos de mi mamá… ¿A que os hace sonreír?...



La mayor virtud del buen sentido del humor es saber reírse de uno mismo… y aquí me tenéis para robaros una sana sonrisa…

La gente que se ríe mucho, resulta atractiva, en cambio aquellas que apenas se ríen, provocan menos afectividad y están más solas…
Un mensaje muy bonito sobre la risa de Phil Busmans de su libro “La Alegría de vivir” dice así:






¡SI NO RÍES NO VIVES!

La risa es salud.
El buen humor es salud.
¿Estás seguro de pensar lo suficiente
en este aspecto de tu bienestar?
Si, a causa de las preocupaciones,
envejece el corazón,
también tu rostro
aparecerá pronto lleno de arrugas.

La risa libera.
El humor relaja.
La risa es capaz de liberarte
de los falsos problemas.
La risa es el mejor cosmético
para tu belleza externa
y la mejor medicina
para tu vida interna.

Si riendo,
tus músculos trabajan regularmente,
tu digestión resultará beneficiada,
e incluso tu apetito se estimulará
y tu presión arterial
permanecerá estable.

La risa y el buen humor
te liberarán de aquella lúgubre seriedad
que vuelve los problemas
pesados como el plomo;
te liberarán, además,
del triste “tran-tran” cotidiano.

La risa y el buen humor
crean espacios nuevos
para alegrías desconocidas.

Un día en que no has reído,
es un día perdido.





La risa, nos ayuda a superar muchas dificultades…
Como en la carrera de San silvestre (celebrada en Noche Vieja), y en la que todos los corredores quieren conseguir un buen tiempo, pero van casi todos disfrazados, y disfrutando… es una maravilla porque en lugar de un gran esfuerzo parece una fiesta, mi padre fue con un gorro de Papa Noel y un pañuelo rojo al cuello… Daba gusto ver a todos tan felices…

Otro ejemplo de lo bueno que es tener buen ambiente, y hacer reír a la gente es en las clases… la educación con humor es más efectiva y amena. Se aprende más, que cuando te obligan o te amenazan…




Con mi hermano cuando éramos niños…

Una frase muy bonita que leí dice:
“La risa es la distancia más corta entre dos personas”

Me encantan algunas películas, con las que no he parado de reír… como la de Mary Popins, el “ratico” en que los protagonistas ríen y ríen y se suben al techo de risa, siempre me la contagian, sobre todo cuando cuenta el chiste de la pata de palo… ¡¡que bien simbolizan la alegría de la risa, elevándose por la habitación!!, Otras pelis que me recuerdan “raticos super diver” son: George de la jungla, las de Groucho Marx, La Edad de Hielo…


¿Os gustan estas bonitas frases?

Una sonrisa (Lao Tse)

“No cuesta nada y produce mucho.

Enriquece a quienes la reciben,

sin empobrecer a quienes la dan.

No dura más que un instante,

pero su recuerdo es, a veces, eterno.

Nadie es demasiado rico para prescindir de ella.

Nadie es demasiado pobre para no merecerla.

Da felicidad en el hogar, apoyo en el trabajo.

Es el símbolo de la amistad.

Una sonrisa da reposo al cansado.

Anima a los deprimidos.

No puede comprarse, ni prestarse, ni robarse,

pues no tiene valor hasta el momento en que se da.

Y, si alguna vez tropiezas con alguien que no sabe

dar una sonrisa, sé generoso, dale la tuya.

Porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa

como el que no la puede dar a los demás.”


Esta noche vieja, no paramos de reír durante toda la cena y parte de la noche… mi madre se ríe muy fácilmente y su risa es muy contagiosa y divertida…






En cuanto le recordamos el tonillo de su chiste preferido, empieza a reír y acabamos todos riendo. A mi padre también le gusta un chiste muy gracioso, con el que todos reímos… A mis hermanos también les encantan algunos chistes, a mi hermana uno que trata sobre el “pajaro Uyuyui”


A mi hermano le encanta el humor de James Bond, y entre los dos se han inventado un divertido cómic, con el cual no paramos de reír…los personajes son muy simpáticos…
y yo me echo a reír en cuanto me cuentan el siguiente: ¿Sabes como se dice espejo en chino?... Chi - Choi – yo!!





En esta foto, estamos anunciando nuestro dentífrico…


Yo estoy en una terapia para cambiar mi risa, porque sino varios vecinos se van a cambiar de casa… pero como me quieren mucho, me han dado otra oportunidad y me pagan la terapia… A ver si tengo suerte y consigo que no sea tan ruidosa… :)

El humor agradable, es el que provoca situaciones inesperadas, aborrezco el sentido del humor “enlatado” quiero decir chiste más chiste que a veces dan pena en lugar de alegrarte…

Aquí va un chiste gracioso:

“-Anoche mi vecino tuvo un ataque de locura; a las tres de la mañana empezó a dar golpes en la pared.
-¿y que hiciste?-Nada… seguí tocando la batería…”




Veraneando en Benidorm, hubo cosas estupendas y conocimos a gente maravillosa, pero el recuerdo más feliz de esas vacaciones, fue una noche, que nos fuimos a cenar a un Mc Donald y sin saber de que ni porque, nos empezamos a reír a carcajadas… todo el mundo se volvía a mirarnos, yo lloraba de risa… no podíamos parar durante toda la cena… Los que atienden, casi nos dan otro menú, porque daba gusto sentir tanta alegria… Fue estupendo.






Una historia muy bonita esrita por Antoine de Saint-Exupéry, en su fascinante cuento titulado: “La Sonrisa”
Cuenta el autor que, capturado por el enemigo, lo confinaron en una celda. Por las miradas desdeñosas y el rudo tratamiento que recibió de sus carceleros, estaba seguro de que al día siguiente lo ejecutarían…




“Estaba seguro de que me matarían, y me fui poniendo tremendamente inquieto y nervioso. Repasé mis bolsillos en busca de algún cigarrillo que pudiera haber quedado en ellos pese al registro y encontré uno que, con manos temblorosas, apenas pude llevarme a los labios. Pero no tenía fósforos; eso sí se lo habían llevado.
Por entre los barrotes miré a mi carcelero, que evitaba mantener contacto conmigo. Después de todo, nadie intenta mirar a los ojos a una cosa, a un cadáver. Decidí preguntarle:
-¿Tiene fuego, por favor?
Me miró, se encogió de hombros y se acercó a encenderme el cigarrillo.
Mientras se acercaba para encender el fósforo, sin intención alguna, nuestros ojos se cruzaron. En ese momento, sin saber por qué, le sonreí. Quizá fuera por nerviosismo, tal vez porque cuando dos personas están muy cerca una de otra es muy difícil no sonreír. En todo caso, le sonreí. En ese instante fue como si se encendiera una chispa en nuestros corazones, en nuestras almas: éramos humanos. Sé que aunque él no quería, mi sonrisa pasó a través de los barrotes y provocó otra sonrisa en sus labios. Me encendió el cigarrillo y se quedó cerca, mirándome directamente a los ojos, sin dejar de sonreír.
También yo seguí sonriéndole; ahora ya lo veía como a una persona, no como a un simple carcelero. Pareció como si el hecho de que me mirara hubiera cobrado también una nueva dimensión.
- ¿Tienes hijos? –me preguntó.
- Sí, mira.
Saqué la cartera y busqué las fotos de mi familia. Él también sacó las fotos de sus hijos y empezó a hablar de los planes y las esperanzas que ellos le inspiraban. A mí se me llenaron los ojos de lágrimas. Le dije que temía no volver a ver nunca a mi familia, no poder llegar a verlos crecer. A él también se le humedecieron los ojos.
De pronto, sin decir nada más, abrió la puerta y sin añadir palabra, me guió hacia la salida. Ya fuera de la cárcel, silenciosamente y por callejas apartadas, me condujo fuera de la ciudad. Allí, ya casi en el límite, me dejó en libertad y, sin una palabra más, regresó.
Aquella sonrisa me había salvado la vida.”



Se pueden encontrar muchas teorías sobre la psicología del sentido del humor y la risoterapia… Si os parece otro día de este Nuevo Año nos “reiremos” con eso… de momento espero que con esta aportación mía, empecéis todos mis amig@s con una sonrisa… varias carcajadas al día y mucho optimismo para los próximos cien años… y recordad que el mejor comentario a esta página es aportar vuestro chiste favorito… Así nos seguimos riendo…


Dime de que chistes te ríes y te diré que humor tienes…


Recibid un beso y una sonrisa…
Hasta pronto!!