miércoles, 23 de febrero de 2011

La cruz de Bécquer…

La cruz de Bécquer…

Seguimos celebrando el nacimiento de uno de los poetas más importantes del mundo, de Bécquer… por ello, nos acercamos un poco más a él y a sus épocas vividas… Así que llenos de ilusión y con mil rimas en el corazón, nos dirigimos al monasterio cisterciense de Veruela, donde vivió unos nueve meses, con su hermano Valeriano… y donde escribió: “Cartas desde mi celda”…



Al cruzar la alta muralla que rodea al monasterio, te sobrecoge una nube de silencio y tranquilidad… y ante ti aparece una imagen maravillosa… un largo y estrecho paseo bordeado de plátanos de sombra, ahora desprotegidos y encogidos por los fríos meses de invierno… ¡¡que postal tan romántica!!


Poco a poco nos vamos adentrando en el Monasterio...


Entramos en lo que anteriormente serían las estancias de los mojes y sus ayudantes… más adelante se encuentra la sala del Abad…

 


y al lado, la estancia dedicada a los libros y documentos… era un espacio amplío pero acogedor… según la guía, idóneo para realizar manuscritos…


 
 
También nos enseñaron la cocina y el refectorio… según la regla de san Benito, los monjes no debían estar en contacto con los alimentos… de una estancia a la otra solo se accedía por un hueco en la pared…


 
Situado al este del monasterio, encontramos el locutorio, la sala capitular y la sacristía…


 
Lo más bonito, para mi gusto, es el claustro, con abundante vegetación, para estar en armonía con la naturaleza… con la vida… y un pozo muy muy profundo…


 
Por último nos sobrecoge la iglesia, tan grande y tan bonita como si se tratara de una catedral abierta al público… sin embargo, a ella sólo accedían los monjes que habitaban el monasterio.


 
Después de comer, nos sumergimos en el museo del vino… es muy didáctico…
 

Al caer la tarde, paseamos y bordeamos el monasterio por el exterior de su muralla, mientras nos acompañan las alegres melodías de los pajarillos… ¡¡que paseo tan bonito!!



 
Y para terminar os dejo, con la foto en “La cruz Negra” donde tantas tardes estuvo Bécquer… y que dio origen al cuadro con el que he comenzado este post y que pinto, su querido hermano, Valeriano...


 
PD1: Muchas gracias por visitarme y comentarme, vosotros dais vida a este blog… os merecéis un regalo, así que a partir de ahora entregaré un premio al mejor comentarista (realizado por Fair Lady, gracias por permitirme su uso, linda :))… lo publicaré al final de cada post, cuando haya publicado el siguiente. ¡¡SUERTE!!
 
 
Comentarista ganador del post anterior:

Gracias por vuestra agradable visita, me encantan vuestras simpáticas, dulces y cariñosas palabras…

Esta vez me ha costado decidirme por el comentario ganador… son todos muy bonitos… GRACIAS!!!
 
El premio es para mi querido padre y amigo, Javier Morera… Gracias a ti, siempre me encantan tus halagadores y poéticos comentarios… es un honor publicar tus palabras en mi humilde post.

Siempre me animan a seguir compartiendo “on line” estos “Raticos Inolvidables”… me quedan tantos por contar!!!!!!!

Aquí tenéis su comentario, espero que os guste:

“Querida Eva:
 
Me encanta tu admiración por este maravilloso poeta…y me encanta tu recuerdo de él en este blog… sabes que compartimos estas aficiones…

Te pongo una de las rimas que mas me gusta… pero decido una u otra según temporadas y momentos de mi vida… cada una me trae recuerdos… y con cada una he pasado mis momentos… Este andaluz que cantó al amor de forma tan linda… siempre nos acompaña… especialmente a ti que eres guapísima y romántica…


RIMA X

Los invisibles átomos del aire
en derredor palpitan y se inflaman,
el cielo se deshace en rayos de oro,
la tierra se estremece alborozada,
oigo flotando en olas de armonías
rumor de besos y batir de alas,
mis párpados se cierran... ¿Qué sucede?

—¡Es el amor que pasa!

Te deseo un siglo, al menos, de alabar a Bécquer… y a ese tipo de amor…

Javier Morera”